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El torneo de boccia se precia de contar con un deportista de pasado glorioso como gimnasta artístico, pero al que un accidente mientras entrenaba lo dejó cuadrapléjico, con apenas 18 años de edad, el 12 de marzo de 2002.
Esa aparatosa caída produjo una severa lesión en la columna vertebral de Jesús Romero, mientras se preparaba en el Centro de Alto Rendimiento con la Selección Colombia para los Juegos Suramericanos. Fueron momentos muy difíciles, que con la ayuda de su familia pudo sortear.
Pasaron diez años y pensó que el ‘bicho’ del deporte no había muerto. La decisión fue volver a practicar una disciplina que se acomodara a su nueva situación, y escogió la boccia, siendo pionero en su departamento, Norte de Santander.
“Fue como una ilusión del nuevo renacer deportivo de Jesús Romero y de querer escribir una nueva historia, allí vamos aprovechando poco a poco, ya vinculados a la parte de Selección Colombia y trabajando duro porque todos los días está subiendo el nivel en este deporte”, agrega.
En cada lugar donde se ubican las camisetas rojinegras sobresale Romero porque es callado, más bien tímido, y apenas responde lo que se le pregunta. Con el fino léxico que siempre se le ha conocido, demuestra su cultura deportiva y en la cancha es líder de su equipo.
“Norte va bien, se subió mucho el nivel, se ganó una mayor cantidad de partidos que en los clasificatorios. En parejas BC4 ganamos bronce y esperemos lo que viene en la medallería en la parte individual. Venimos de menos a más, hace tres años solo éramos tres deportistas y apenas ganamos una medalla de oro, hoy en día somos seis y allí estamos en la disputa de varias medallas, esperemos que lo que se a trabajado sea el resultado al final de la competencia”, afirma.
Romero empezó con la práctica de la boccia en Cúcuta hace tres años y medio, y espera que con los buenos resultados obtenidos sigan llegando muchos deportistas.
“Me di un descanso de unos diez años, la verdad, creí que ya no iba a volver a hacer deporte, ya lo que había hecho en mi vida con gimnasia, creí que hasta allí había llegado, pero Dios me puso esta nueva oportunidad, la estoy aprovechando, pero igual toca trabajar mucho para obtener buenos resultados”.
Jesús confiesa que la principal motivación fue “volver a sentir la adrenalina, la pasión del deporte se lleva por dentro, se lleva en la sangre, pero ese cosquilleo y los nervios que se sienten antes de una competencia fue lo que más me motivó a estar otra vez en esta área”.
Acerca de la escogencia de la boccia, dijo que fue el deporte en el que más lo impulsaron y llamaron para practicar, lo hizo al principio como un ‘hobbie’ y cuando estuvo en su primer campeonato nacional se enamoró de esta disciplina. “Creo que hay Jesús Romero deportivo para rato”, advierte.
“Di todo lo que pude como gimnasta y ahora daré como ‘bocciero’ hasta que Dios me lo permita”, señala. Sobre los nuevos talentos de la gimnasia en su departamento, Jesús dice que “cada vez que se retira alguno de los gimnastas siempre ya viene la escuela, y eso es gracias al trabajo del entrenador Jairo Ruiz Casas, tenemos que agradecerles a los primeros gimnastas que nos abrieron las puertas, y que hoy en día estén Jossimar Calvo, Johnny Muñoz, Carlos Calvo, y ya vienen figuras de las categorías preinfantil e infantil es señal de que hay muy buen material humano, pero también muy buen material técnico”.
Hace una comparación con Jossimar y concluye que se parecen en la inteligencia, la responsabilidad, la facilidad para poder ejecutar los elementos y esa chispa en los ejercicios para trabajarlos primero en la mente.
“La boccia es un deporte de mucha precisión y se requiere de mucho trabajo, estar repitiendo y repitiendo bola para saber cuánto te va a rodar, cuánta es la fuerza que necesita, repetir al igual que en la gimnasia, hasta llegar al punto de perfección. Si se trabaja un mes bien y se para un día, se pierde todo el trabajo”, finalizó.
En su trayectoria como gimnasta, Romero fue campeón suramericano infantil (Perú 1994), medalla de plata en el Suramericano Infantil (Chile 1997), subcampeón panamericano (Houston 1998), tres veces medalla de bronce y una de plata en los Juegos Bolivarianos (Ecuador 2001).
La jornada del miércoles 2 de diciembre
El campeonato de boccia tuvo este miércoles las eliminatorias y cuartos de final en todas las categorías en individuales, mientras el jueves 3 de diciembre se tendrán las semifinales y finales, con premiación general a partir de la 1:00 p.m.
Cauca, Boyacá, Santander, Valle, Caldas y Meta tendrán a sus representantes, varios de ellos miembros de Selección Colombia, en las instancias definitivas, en busca de la medallería.
Prensa Coldeportes - Acord
